Empresa y Familia – #1
Premios De Ley 2019
OLMEDO Y VELASCO ABOGADOS
Empresa y Familia
Hay un viejo aforismo que dice “ Los abuelos fundan las empresas, los hijos las disfrutan y los nietos las venden (o las hunden)”, nada mejor que este aforismo para poner de manifiesto lo que ocurre en un gran número de ocasiones con las empresas familiares, y no es otra cosa que las dificultades de realizar los relevos generacionales y la llamada sucesión empresarial.
Empresa y familia son dos de las instituciones más importantes sobre las que pivota la económica española, basta acudir a los datos del Instituto de Empresa Familiar para comprobar que las empresas familiares dan empleo al 66,70% de los trabajadores y representan el 57,10% del Producto Interior Bruto.
Para que la empresa familiar pueda sobrevivir a los distintos cambios generacionales es fundamental que sus miembros sepan diferenciar la esfera familiar de la esfera empresarial, todo ello dirigido a evitar tensiones y malentendidos entre sus miembros y, como consecuencia de ello, se vea afectadas sus relaciones interpersonales.
Otro aspecto de capital importancia en las empresas familiares es la unidad de sus miembros, todos tienen que tirar en la misma dirección, ya que como dijo el Abogado Abdurrahman B. Paksoy, creador del bufete de abogados Paksoy a sus hijos “es fácil romper un hilo, pero no están fácil quebrar diez juntos”.
Importante rasgo diferencial de las empresas familiares del resto de las empresas es la vinculación con la empresa, sus miembros consideran que es una creación suya y por tanto, en sus decisiones juegan mucho el capital emocional, para lo bueno como para lo malo.
Sin perjuicio de lo dicho hasta ahora nos encontramos con que el Derecho de igual forma ha contribuido y contribuye a la supervivencia de las empresas familiares mediante distintos mecanismos de carácter fiscal (reducción o bonificaciones en los Impuestos de Sucesiones y Donaciones), mercantil (consagrándose la libre transmisión de particiones sociales entre socios así como los cónyuges o restricciones a la transmisión de las mismas etc), pero todo ello se ha quedado corto, por lo que se ha hecho necesaria la creación de un instrumento que tenga por objeto principal la separación de la familia y la empresa y la regulación de las relaciones de los miembros que lo componen así como la implantación de mecanismos dirigidos a sancionar el incumplimiento de este acuerdo interno, en principio secreto, de los miembros de la FAMILIA. Dicho mecanismo es el llamado PROTOCOLO FAMILIAR y desde aquí vamos a comenzar una serie de publicaciones dirigidas a explicar en qué consiste el PROTOCOLO FAMILIAR y porque la conveniencia de implantarlo en las EMPRESAS FAMILIARES.